Por mucho que suba el Dax, los alemanes huyen de los riesgos y se mantienen alejados de las acciones. ¿Todos? Desde hace ocho semanas unos estudiantes prueban suerte en la bolsa. Con unos fondos virtuales de 50.000 euros compran y venden acciones reales. Los mejores jugadores ya han llegado a obtener un 20 por ciento de beneficios.