Trabajadores informales de la parrroquia de Petare, situada en uno de los barrios más extensos de Latinoamérica, se quejaron porque el alcalde Carlos Ocariz, del municipio de Sucre, no les ha puesto el alto a los desmanes de los vándalos a sueldo de la oposición, y su complicidad ha facilitado que esa parte del sector conurbado con Caracas se erija en foco de delincuencia donde ya se han registrado hechos de sangre. teleSUR