Los primeros intérpretes del organillo llegaron desde Alemania e Italia en el siglo XIX, instalándose en Chile, una tradición cultural. Sin embargo, en las últimas décadas este oficio ha ido perdiendo adeptos. Y aunque no existe un catastro oficial, fuentes del gremio estiman que sólo quedaban en torno a 50 en todo el país.
Nota:
https://noticiasncc.com/cartelera/articulos-o-noticias/03/07/organilleros-chilenos-resisten-ante-la-pandemia/